En el disputado mundo de los sistemas operativos para tabletas, se ha dejado ver la versión de Ubuntu para las mismas.

Lo que llama mucho la atención es que parece más una versión tuneada de Windows 8 que la distribución más popular de GNU/Linux…

Cuando varios competidores se enfrentan al mismo problema, pueden pasar dos cosas: que sus respectivas soluciones vengan desde enfoques distintos, o que se les haya ocurrido la misma idea, con resultados similares.

El F117 y el B2, dos maneras diferentes de hacer un avión furtivo al radar…

Una tercera vía podría ser esperar a que tu contrincante de con la solución y copiarla vilmente, cosa no tan rara.

¿Un B-29? ¡No, es el Tupolev Tu-4, la copia soviética!

Misteriosamente, en el mundo de Linux se llegan a las mismas conclusiones estéticas que sus competidores después que estos hayan invertido mucho tiempo y dinero en su desarrollo.

La sombra de Windows 95 es muy larga…

Parece que la historia se repite con Ubuntu Touch, una especie de mezcla de Android y Windows 8. Como ya dijimos hace algún tiempo, Ubuntu se iba a especializar en tabletas, y año y pico después tenemos algo a la vista.

Entre sus características «únicas» nos encontramos unas cuentas de usuario…

Pantalla de bloqueo personalizable  que hay que desplazar completamente en una dirección…

La posibilidad de ejecutar dos aplicaciones a la vez en la misma pantalla… Para ello han optado por dejar unas proporciones asimétricas para cada aplicación.

Menús desplegables desde los márgenes de la pantalla…

Ciertas funciones que se atribuye el sistema, como compartir ciertas cosas de las aplicaciones o hacer búsquedas dentro de las mismas… Y si tienes una tableta PRO, podrás colocarle un ratón y un teclado para tener un PC con todas las aplicaciones de Ubuntu.

Pero no te confundas: al parecer no podrás disfrutar de tus aplicaciones de escritorio de Ubuntu x86 de toda la vida si tienes una tableta modesta…

Visto lo visto, podría decirse que Windows 8 va por buen camino, cuando sus competidores cogen tantas ideas «prestadas», o han descubierto que la mejor o única solución es hacerlo al estilo de Microsoft. La pregunta es ¿llegará a ser un competidor de Windows 8, cuando salga allá en el 2014?