En su día y con pocas semanas de diferencia Microsoft anunció además de Windows 8 y Windows 8 RT un tercer producto con la palabra Windows y el número 8 en el nombre del producto: Windows Phone 8 (WP8 en lo sucesivo).

WP8 es la apuesta de Microsoft en el mundo de los sistemas operativos de móviles. En ese momento Microsoft ya estaba presente con otro producto llamado Windows Phone 7. Digo «otro» producto y digo bien porque pese a que la apariencia general del producto era similar (las conocidas teselas que ahora asociamos a Windows 8 ) el producto internamente era totalmente distinto al que se presentaba en ese momento, WP8.

WP7 se basaba en el Windows CE (es una simplificación, OK) que era y es un sistema operativo de Microsoft para dispositivos móviles. El antiguo Windows Mobile también estaba basado sobre Windows CE. Pero WP8 se basa en el mismo kernel que Windows 8 RT, comparte partes importantes del core del sistema.

Quizás Microsoft debió cambiar el nombre más radicalmente pues por el parecido general externo entre WP7 y WP8 cosecharon críticas pues los teléfonos que soportaban WP7 no soportaban WP8 pese a que aparentemente solo era un cambio de versión.

El caso es que aparecieron varios teléfonos con el nuevo sistema operativo WP8 y pasó bastante desapercibido hasta que el gigante de la telefonía móvil finlandés NOKIA apostó por WP8 como el sistema operativo para sus smartphones en detrimento de otros proyectos de la marca que fueron aparcados sine-die.

Nokia a producido una buena serie de teléfonos con WP7 y WP8 el último de los cuales, el top-of-the-line, es el Lumia 920, un smartphone simplemente brutal por su diseño y su gran integración con WP8 pues NOKIA sacó una serie de aplicaciones aprovechando su compra de los mapas de Navteq. HERE Drive (programa GPS con instrucciones giro-a-giro), HERE Transit (alucinante programa para ayudarte a circular por transporte público), HERE Maps (el equivalente al Google Maps) y Nokia Pulse (red social que va más allá de Foursquare y otros similares).

Otros fabricantes también han apostado por WP8.

Tenemos el HTC 8X que curiosamente imita (?) el concepto del Lumia; una tapa trasera de color y un frente negro. La verdad es que se parecen bastante.

Y por último el terminal por el que he optado, Samsung ATIV S. Aunque exteriormente no innova tanto como el Lumia (y sus copiones) tiene un diseño ya probado como el del Samsung Galaxy SIII o el Samsung Note 2. Se diferencia del SIII simplemente en que las esquinas del equipo son menos redondeadas, más como el «antiguo» SII. También cuenta con una tapa trasera que aun siendo de plástico simula metal. Pero quitando esos dos detalles tendremos de apariencia un SIII ejecutando WP8.

Pero hay dos factores que marcan los motivos por los que adquirí este en vez del Lumia 920. Primero su pantalla superAmoled de 4.8″ que resulta ser la más grande que ejecuta WP8. Y segundo su slot para tarjetas microSD que es una característica que también lo diferencia del resto.

No nos engañemos, a nivel de CPUs, memoria, etc… WP8 es aun bastante restrictivo lo que hace que prácticamente todos los equipos monten el mismo hardware por lo que son estas dos cosas (la pantalla y la microSD) lo que supone una diferencia cualitativa.

Y ya he revelado mi secreto. Me he pasado a Windows Phone 8. ¿En serio? Si, en serio.

Mi trayectoria de «switcher» eterno me lo imponía. Empecé en el mundo de los smartphones con Nokia 9100. Después pase a Palm OS con el Treo 280 y el Treo 600. Entonces llegó mi primer contacto con Microsoft y su Windows Mobile con unas serie de dispositivos que culminaron en el entonces mamotétrico HTC X7500 con pantalla de 5″. El siguiente paso fue Apple e iOS con el iPhone 3, 3GS y 4 en rápida sucesión. Por último he disfrutado del robot verde de Android en varios equipos hasta llegar al Samsung Galaxy Note. Todo mezclado con sucesivos dispositivos Blackberry debido a mi trabajo.

Así que este paso era de esperar. Podría haber ido a Blackberry y su nuevo Z10, pero tuve la Playbook y la nueva versión del sistema operativo de RIM y en esa pequeña joya de tablet ya nos dieron un buen aperitivo de lo que ahora nos mostraron.

Por ello el paso a WP8 ha sido el cambio más lógico.

Llevo poco con mi ATIV S pero ya he aprendido a amar WP8. Combina, yo creo, a la perfección la sencillez de uso y fluidez de iOS con la versatilidad de los widgets de Android. Sorprende ver un equipo con una CPU dual core moviendo WP8 con una fluidez que me recuerda 100% a la de iOS. Por otro lado el sistema de teselas (¿mosaicos?) nos permite tener información en la pantalla principal tal y como nos gusta a los usuarios de Android y de ese modo conseguir un resultado menos espartano que el de iOS.

Por otro lado los detractores de WP8 hablan de carencias de software. No es del todo cierto. Aparecen muchas aplicaciones cada día. Por ejemplo de las que usaba habitualmente en mi Note ya tengo instaladas por supuesto Facebook y Twitter, pero además ChatON (el Whatsapp de Samsung), Whatsapp, LINE, Evernote, OneNote, Foursquare, la nube de BOX.NET, la nube de Skydrive, y por supuesto Office que es un Office mejor que el Polaris Office que tenía en Android pues es el original de Microsoft para móviles.

¿Qué programas en principio hechas de menos? Bueno Google, como ya hizo con Apple, tiene una pelea con Microsoft y no ha sacado sus programas para WP8. No tienes ni Google+, ni el Traductor, ni Goggles, ni Mapas, ni Navigator, ni Drive. Pero ¿saben que? Las alternativas son aun mejores. Nokia ha puesto en el MarketPlace de WP8 sus aplicaciones GPS ya comentadas antes y son mejores que las de Google. Por ejemplo HERE Drive usa mapas offline. Adiós a la necesidad de tener cobertura 2G/3G para poder conducir. En cuanto a Traductor y Goggles está Microsoft Bing. Es impresionante. Pulsamos el botón de la lupa y podemos buscar por texto, una foto, escanear un código QR, enfocar un texto y que lo traduzca, en fin todo lo que hacías con esos dos programas y más.

Google+ se puede usar en el navegador, es la magia del Internet Explorer. Pero efectivamente Gtalk no lo puedo usar. Pero tenemos por ejemplo IM+ que accede a Facebook Messenger, Skype, Google Talk, Yahoo! AIM y un sin fin más de aplicaciones de mensajería instantánea.

Efectivamente pocos desarrolladores han apostado aun por la plataforma, pero los que lo hacen no se limitan a hacer un refrito de la aplicación Android sino que desarrollan con el WP8 en mente.

Un ejemplo de ello es el Foursquare. El programa WP8 hace que el de Android sea feo y espartano.

¿Otras aplicaciones que llevo en el Android y encontré sin problemas? Photobucket, IMDB, Skype, FON, BBVA, Dictionary.com, y hay varios para consultar el DRAE (diccionario de la Real Academia), Apalabrados, Angry Birds (aunque son de pago, pero menos de un euro) y hasta Bittorrent. Todas del mismo desarrollador que la aplicación de Android o iOS.

Hecho de menos mi Aldiko adorado lector de ePubs y TicketMaster para hacer la compra de entradas del cine, aunque este último puede ser usado con el Internet Explorer, aunque se hecha de menos la aplicación. También es una puñeta tener que usar Google Drive y Dropbox usando la página web, pero funciona.

En resumen. Empiezo mi aventura y como Hernan Cortés voy a quemar mis barcos para evitar la tentación de volver atrás, así que venderé mi Galaxy Note con gran dolor de mi corazón. Pero creo que voy a hacerme a este nuevo sistema operativo como de hecho me he hecho a usar Windows 8 en el PC de mi mujer. Curiosamente me he encontrado a mi mismo prefiriendo usar Internet Explorer 10 para navegar por Internet en el PC de mi mujer en vez del Chrome o Safari en mi Mac (pero no lo cuenten por ahí, shhhhh).

¿Me llevará esta aventura a buscar un tablet con Windows RT? El tiempo lo dirá.

De momento aquí me tienen con mi nuevo teléfono y mi cara de felicidad. Como un niño con zapatos nuevos.