Leo en GigaOM que Lenovo retira sus modelos de 8 pulgadas ante la falta de demanda. Esto tiene consecuencias más importantes de lo que parece, como veremos tras la pausa

Ante todo, son modelos de 20 cm en diagonal, normalmente en relación 16:9. Lo digo porque soy incapaz de pensar en pulgadas y, en su lugar, uso el sistema métrico que se emplea en la inmensa mayoría de las naciones de la tierra salvo 3. Me parece importante no ceder ante medievalismos que confunden al público no-norteamericano, como igualmente es de recibo no compararlo con partes del cuerpo: ni mi palmo es el mismo que el de otros, ni…

Es sólo un fabricante, por más que sea de los más importantes. Al loro con el panorama

Lenovo ThinkPad 8 and smaller version of the Mix 2 — Lenovo sells a 10.1-inch model — are both disappearing from store shelves and Lenovo’s U.S. retail site. Remaining stock will be diverted to other countries where demand is higher for lower-cost, small Windows tablets. That includes Brazil, China, and Japan, according to the company. Both tablets run the full version of Windows, not the ARM-powered Windows RT software.

La cuestión fundamental aquí es que Microsoft iba a regalar windows para los dispositivos más pequeños de 10 pulgadas, o 25 cm en diagonal. Eso era un signo evidente de que querían ser más agresivos ante la falta de penetración de los dispositivos compactos con windows, comparados sobre todo con el mercado Android, donde más de 120 euros es precio premium para esos tamaños. El problema es que ni de lejos se acercan a los precios Android… y la proposición tampoco acaba de convencer.

Para empezar, disponer de Win32 en 8″ es relativamente útil para quien no sea un frikardo orgulloso y convencido. Se acepte o no, el tamaño de pantalla es demasiado pequeño como para ser realmente cómodo. Metro es otra cosa, claro, funciona perfectamente, pero sigue sin ser un factor de venta determinante.

Lo que se tiende a olvidar, finalmente, es que los zapatófonos, o teléfonos de más de 5 pulgadas (12.5cm) de diagonal, ha arrasado en sectores medios y altos que no sean manzaneros. Yo llevo con un sapatófono desde hace 4 años y ya me resulta inaceptable volver al tamaño de un iphone 5S. Todo indica, de hecho, que Apple se pliega a las demandas del mercado y que en otoño veremos el dispositivo intermedio entre un iPad mini y un iPhone.

El iPad mini ha tenido buena acogida entre los maqueros, pero no tanto entre los que no lo somos. Y no la ha tenido, creo, ante todo por los zapatófonos. El problema es el factor diferencial.

Aún conservo un HTC Flyer de 2011, un estupendo tablet de 7″ que HTC heroicamente sumergió en la oscuridad, siendo un adelantado a su tiempo. En su momento me aportaba muchísimo, porque era un dispositivo mucho más grande que mi teléfono de 3.5″ (9cm) de diagonal de la época, el también estupendo y absurdamente limitado HTC desire, y más pequeño que un portátil. Tenía sentido tener un desire y un flyer encima, según lo que necesitaras en cada momento.

Eso dejó de ser así con los galaxy note 2 y 3 que he poseído sucesivamente. El Note me sirve como teléfono y como tablet pequeñito de manera excelente. Leo con total comodidad, escribo y opero, y lo uso como teléfono. Ya digo, no me imagino queriendo estar con un móvil más pequeño.

Sabiendo que el tamaño canónico ha llegado a ser de 5″ (12cm) en Android, un tablet menor de 10″ (25cm) (y por lo tanto, insuficientemente distinto) convence sólo si es muy barato, si su factor de compra por impulso es elevado. Eso no ha sido el caso con Lenovo, y no tengo claro que llegue a ser nunca con ningún otro fabricante, por más que se regale windows. Puede ser que un tablet realmente barato sea una amenaza para otros productos de precio más elevado, o que los componentes no puedan ser igual de baratos que con un SoC ARM. No estoy seguro, pero las cifras están ahí: podemos decir que la diferencia de precio entre tablets android y windows equivalentes es de al menos 100 euros.

Si se acaba cayendo, si no acaba de cuajar la estrategia de regalar windows para dispositivos de menos de 10″, Microsoft está fuera de ese campo. Tan sencillo (y duro) como eso. No digo que no valga, porque no es cierto: digo que se dejará de ofertar en términos suficientes.

Y el culpable final es Microsoft, los fabricantes y las grandes superficies. De todos ellos. No se gastan dinero en promocionar, en enseñar al público, en mantener encendidos equipos de muestra y asumir su desgaste. No ponen suficientes chavales, y suficientemente preparados, para solucionar dudas de los nuevos usuarios que no sean geeks. Son dispositivos que, si se encuentran en una gran superficie, están apagados la mayoría de las veces, no se pueden probar y son más caros que los dispositivos Android… que sí se pueden probar.

El tiempo corre. La competencia se sigue moviendo. Es lo que hay, señores

Y no hablo de ChromeOS por no liarla más, que en teoría llega a España antes del otoño