Actualmente los wintablet baratos tienen un problema: windows. O, mejor dicho, el espacio que ocupa windows. Nadie da duros a cuatro pesetas, y si se quiere bajar el precio, se ha de recortar componentes. Concretamente, se llega a ofrecer tablets con 32Gb.
Arrancando la primera vez, Windows se ha comido un espacio importante de esos 32 gb. Peor aún, las sucesivas actualizaciones van acaparando espacio hasta que, pasado un tiempo, la máquina no da más de sí.
Entendemos que Microsoft no ha querido dar la batalla perdida con las wintablet baratas, y por eso parece que va a bajar sustancialmente el espacio que consume de almacenamiento. En primer lugar, se comprime parte de los archivos de sistema, recuperando de 1,5 a 2.6 gb, según sea 32 ó 64 bits. En segundo lugar, van a dejar como opcionales los archivos de recuperación, permitiendo liberar entre 4 y 12 gb adicionales
La compresión del SO no es gratis: requiere consumo de recursos para acceder a los archivos. En máquinas muy limitadas, esto puede suponer una ralentización importante. Y ocurre que las máquinas limitadas van a ser las que lleven esos mini-discos duros.
Sin duda es un paso adelante, pero hay que ver si es demasiado poco y demasiado tarde para que las wintablet baratas tengan oportunidades frente a android. No digo que sea imposible: digo que se tenían que poner las pilas y sacar una versión realmente limitada y adaptada de windows para esas tabletas, como se hacía con el vlite en tiempos, con el que pude instalar un windows 7 en un centrino con 20gb y que corriera
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