Esto no puede seguir así, a menos que continue.

Ayer me taré. Me pasó lo que le pasa a Rafa y a Jordi de vez en cuando. Pensé en una pieza de hardware y se me escapó el dedo, dando en «comprar». Oops

Lo que compré fue un Logitech K480. Un teclado bluetooth de membrana con capacidad para sincronizar con 3 dispositivos.

Otro teclado, sí.

Llevo menos de un día con él… y me ha abierto los ojos. La review completa llegará más adelante, si me da el tiempo, pero me importa más la idea.

Este teclado es magnífico por varios motivos

1. La sincronización con varios dispositivos es simplemente gozosa
2. Su pesazo de 800 gramos le da una estabilidad brutal encima de las piernas o en cualquier parte. Ya sé que la moda ahora es la anorexia, pero en teclados se agradece el peso, como sabe rafa con su filco. Que no se mueva un teclado es una gran cosa.
3. El recorrido es decente, por más que la resistencia sea gomosa y débil
4. El zócalo. Donde habéis visto que engancha el tablet y el smartphone. Ya lo había empleado en otros dispositivos, pero aquí se sale: es perfectamente estable con un dispositivo que quepa, y sacas el dispositivo sin esfuerzo. Me peo en conectores magnéticos o mecánicos, esto es lo más. Claro, a cambio el teclado tiene que ser gordo. ¿Ya había dicho que la anorexia tecnológica es una gilipollez, verdad?

Esto me lleva a concebir el Teclado definitivo:

1. Tiene que pesar, para ser estable
2. Tiene que tener un zócalo para meter uno o varios dispositivos. Esto lo hará grueso. De hecho, las dimensiones del K480 lo hacen muy estable en las piernas
3. Tiene que ser multidispositivo. 3 dispositivos sería el mínimo, 4 ó 5 mejor. No sincronizar cada vez es genial
4. Tiene que tener un trackpoint y dos botones de ratón. El clásico botón rojo de thinkpad es comodísimo para tener un teclado y ratón a la vez. Si es chungo mecánica o patentariamente, un touchpad a la derecha haría el avío, pero aumentando el tamaño hasta convertirlo en las tablas de moshe
5. Por último, pero lo más importante: tiene que ser mecánico. O bien cherry transparentes con amortiguadores, por el ruido, o bien brown, que es el actuador al que estoy acostumbrado y un término medio muy bueno.

Un teclado así no sería mi único teclado, porque eso es imposible, pero sería un gran teclado que orbitaría a mi alrededor constantemente. Soy consciente de que soy mucho más exigente de lo habitual con los teclados, pero estoy contento de que esta experiencia me haya llevado a concebir un teclado realmente adecuado y poderoso.

Del dicho al hecho, en este caso, hay un trecho. O un abismo, quizás. Pero me gusta tanto la idea que voy a evaluar si tengo capacidad para ejecutarla