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Nov 2016
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Mejorando la experiencia de uso de mi SP4

Decíamos ayer (nunca mejor dicho, valga la rebuznancia), que estaba viendo la Keynote de Microsoft cuando presentaron el cilindrín, ay el cilindrín que gustirrín… esto…

… presentaron el cilindro ese llamado Surface Dial y yo, qué queréis, me enamoré. Y todavía más cuando dijeron que funcionaría en la Surface Pro 4.

microsoftdial

¿Otra vez con el NaNoWriMo y la pasión literaria trasnochada? Pues sí, ¿qué pasa? Y la que te rondaré, morena.

No, no voy a escribir una entrada de al menos mil setecientas palabras en Wintablet cada día. Esto solo me sirve de pre-calentamiento para coger el toro por los cuernos. Lo que sí voy a hacer es escribir algunas entradas que tenía pendientes.

Decía que eso del Dial me enamoró al momento. Ya sabéis que no soy muy ortodoxo, así que el uso que a mi se me ocurrió no es el que mostraron…

¿Qué? No, no van por ahí los tiros. Estos tíos, solo pensando en lo mismo.

… El uso que me gustaría darle es otro, en conjunción con la Surface Pro 4 (¿Sabíais que entre escribir SP4 y Surface Pro 4 hay una diferencia de dos palabras que me acercan más al objetivo diario? Y más si encima pongo esta apostilla entre paréntesis).

Bueno, volvamos al meollo del asunto.

Ya sabéis que me gusta mucho el sofing, el estar espatarrado en el sofá con una tableta o libro electrónico en las manos, leyendo y chateando con los impresentables de este blog.

Lo habitual es que utilice sendos iPad Pro, el de 9.7 para las cosas normales y el de 12 para las revistas y las ediciones en facsímil que originalmente tienen tamaño grande, como por ejemplo mis Julios Verne de Sáenz de Jubera, que superan el folio.

Eso y el palito de Apple han sido mi desarrollo diario en casa. Incluso Netflix lo veo en el iPad en lugar de hacerlo en la tele de 55 pulgadas, así no molesto a la parienta y ella puede ver sus cosas en ella.

Antes del Apple Pencil estuvo un Adonit Jot Pro, ese que tiene la punta circular plana con una cruz que hace que pintes exactamente donde quieres.

Por otro lado ocurre que escribir en la SP4 es una experiencia mucho más satisfactoria que hacerlo en un iPad con su correspondiente puntero. Sin ser perfecta, la sensación de desplazar la punta sobre el cristal es mucho más placenetera y realista.

Pero como ya os he comentado en muchas otras ocasiones, la experiencia tabletera con la SP4 no es la óptima. Sin entrar en detalles sobre la calidad de las aplicaciones (empieza a haber algunas bastante buenas y funcionales), la interfaz es más escritorio que tableta, y si bien Windows 8 era más ergonómico en ese aspecto, Windows 10 pierde bastante.

Mis tareas habituales son contender con PDF, anotarlos y luego escribir sobre ellos. Entre medias lo que salga: Twitter, Reddit, Goodreads, correo, el chat de Wintablet y el de mi parienta…

Cuanto más uso Drawboard PDF más me gusta porque descubro características que no sabía que tenía. Por ejemplo, ahora puedes añadir una barra lateral vertical a la que le puedes poner accesos directos a los elementos que de otra forma estarían en la roseta desplegable esa, o bloquear el menú lateral para que esté siempre visible, eso sin contar el modo nocturno inverso.

Por lo tanto, para los PDF, la combinación de Drawboard y de FreeFileSync (gracias, Sansa) contra mi NAS es más que suficiente para poder trabajar con este tipo de ficheros.

Otro tema es el de escribir a mano alzada. Sí, OneNote es muy bueno en eso, pero tiene varios problemas, y no solo en Windows. El tema de la sincronización es algo que deben de solucionar a la voz de ya, y no parece que le estén dedicando mucho empeño.

Puede que a la mayoría de la gente la segunda pega, y principal para mi, no lo sea. Me refiero a la forma de escribir. En iOS hay muchas aplicaciones que disponen de la opción de tener un cajetín en la parte inferior de la pantalla que actúa a modo de panel de escritura, de forma que tu escribes ahí con tu letra, exactamente igual que si estuvieras haciéndolo sobre papel, y el resultado se va añadiendo en el lugar adecuado de la superficie real.

Estos cajetines suelen funcionar de forma automática. Es decir, tu vas escribiendo de izquierda a derecha como en un papel y, cuando llegas al final, te posicionas en el inicio y sigues escribiendo. Es el sistema el que entiende lo que estás haciendo y continua la línea o salta a una nueva.

En Windows no he sido capaz de encontrar ninguna aplicación que tenga eso. Bueno, no, miento, hay una, que me desveló Mahjong. Se llama Scrble y como la mayoría de aplicaciones de la Tienda de Windows, es una mierda. Es aspecto es increíblemente infantiloide y apenas tiene opciones interesantes y, para más inri, el supuesto cajetín de escritura no es más que el zoom de la zona de trabajo, por lo que tu escritura se ve increíblemente pixelada.

Podría escribir en el panel de escritura a mano alzada y pasaría directamente a texto, pero pierdo mucho tiempo intentando corregir lo escrito cuando o bien me interpreta mal o bien mi letra se convierte en un garabato completamente ininteligible.

De todos modos, creo que probaré esta opción si mi nueva Cube i7, que está al caer, no soluciona mi problema (prometo review). Y siempre me queda la opción de hacer una aplicación que cumpla mis propios requisitos… pero entonces programo y no leo.

Ja, ja, al final me he ido por los Cerros de Úbeda de forma inconsciente. Bueno, al menos lo explicado sirve para que os hagáis una idea de mi flow sofaril.

La idea de esta entrada era explicaros cómo he conseguido volver a darle vida a mi Surface Pro 4. Decía que después de ver el funcionamiento del Dial, a mi se me iluminó la bombilla cuando Chulilla, en nuestro chat interno, digo algo como “¡pero si no es más que un trackpad redondo!”.

Si al final, lo que yo necesito, o más bien la idea que tenía, era la de disponer de una especie de trackpad para poder moverme por la pantalla de la SP4 como si estuviera en el escritorio.

En general, las cosas que más me aborrecen de la SP4 es que el palito no sirve para mover la pantalla ni hacer desplazamientos, cosa que sí hace el Apple Pencil…

Por lo tanto, si me compro algo como esto, tengo el Dial pero sin dial. Así que ni corto ni perezoso me puse a buscar por internet y llegué al siguiente dispositivo:

sketch

Ah, amigo.

Eso es un ratón convencional pero que tiene toda la superficie táctil, como si fuera un Magic Mouse de Apple. Y lo más importante: tiene gestos. Y otra cosa más: puedes invertir el sentido de desplazamiento y usarlo como se usan los ratones de Apple, desplazando el texto en la misma dirección que los dedos, en cualquier ángulo.

Así que ni corto ni perezoso lo compré y comencé a usarlo de forma satistactoria, o casi. Alguna pega tiene: hay un gesto que no funcionan en Windows 10: el de desplazar desde los bordes para abrir el área de notificación y la lista de programas abiertos.

Otro defecto: pese a que puedes elegirlo en el programa de configuración de Logitech, solo puedes activar hacer doble tap con uno o con dos dedos. Si activas uno, el otro no funciona. En mi caso, lo que he hecho es que al hacer doble tap con dos dedos, se me abre la lista de programas (el equivalente a hacer Windows+Tab).

Aquí podría volver al hecho de que instalar un hook global de ratón o teclado no es muy difícil y podría capturar todos los mensajes del ratón y convertirlos en lo que quiera… pero de nuevo vuelvo a programar y no a hacer lo que quiero hacer.

Pues bien, con ese cacharrín activo por Bluetooth, yo recostado en el sofá y con él en la pierna o la propia superficie del sofá, estoy más que a gusto manejando mi Surface Pro 4, eliminando varias de las pegas que siempre le he encontrado.

Si os fijáis, lo que he hecho ha sido acercar mis acciones en el sofá a las del escritorio. Con ello he conseguido un menor cansancio de manos, una pantalla más limpia (la SP4 es bastante guarreta respecto a los iPad), y en general un mejor uso.

El Logitech ese no deja de ser un ratón con superficie táctil. Una ventaja es que funciona sobre casi cualquier superficie, sea dura o no. Y si quieres desactivarlo, lo dejas boca arriba y cuando el sensor deja de ver una superficie, queda completamente muerto, con lo que te evitas que la pantalla de tu SP4 se active si lo mueves accidentalmente.

Otra de sus ventajas es que la batería interna es recargable mediante un conector micro-usb en, digamos, la misma parte por donde se cargan los nuevos ratones de Apple. Sí, el culo. En fin.

Chicos, tengo un problema. Me faltan algo menos de doscientas palabras para completar mi día del NaNoWriMo, así que…

Más de uno de vosotros debe haber pensado: ¿Qué cojones hace el puto fanboy de Apple, hablando y queriendo a sus wincosas? ¿Tendrá algo que ver con la última Keynote de Apple, y realmente se está cansando, o simplemente quiere salirse de la jaula con barrotes de oro y polvo de hada virgen?

Pues sí y no. De hecho la compra del Logitech fue anterior a la Keynote de Apple y, aunque los editores de Wintablet ya habíamos comentado internamente sobre la pantalla-en-el-teclado de Apple, y la ausencia de la tecla escape, yo estaba bastante ilusionado con lo que quiera que fueran a presentar.

De hecho durante la presentación me entusiasmé bastante, entusiasmo que rápidamente se enfrió cuando me puse a pensar seriamente en las novedades y las cosas que habían eliminado.

Por lo tanto, no estamos ante una reacción al anuncio de Apple, sino más bien a una especie de cansancio ante los pequeños problemas que la plataforma me está dando.

Cansado de tener que recargar el reloj una vez cada uno o dos días. Con el iPhone me pasa igual. Con iOS 9 la batería me duraba tres días. Con iOS 10, apenas dos y a veces uno y medio.

Mi iMAC del 2011 está empezando a acusar la obsolescencia programada de Apple. Un equipo que está como el primer día, que tiene un precio de 4200 euros según Mac2Sell, gracias a todos los añadidos y cambios que le he ido haciendo con el tiempo, y que no termine de funcionar bien con macOS Sierra.

Siempre lo he dicho. Si Apple me da los mismos problemas que Microsoft, me vuelvo a lo conocido.

De nuevo no es cosa de esta última semana, no. Llevo ya varios meses pensando en ello. De hecho, a la semana o así de salir, pedí un iPhone 7 Plus y un Watch de segunda generación y, cuando faltaban apenas unos días para recibirlo, anulé el pedido, y no lo siento.

No sé, ya no me atraen las cosas brillantes de Apple. Ya no soy esa urraca que ve algo que reluce y me lo llevo al nido. Es como si hubiera sentado la cabeza. Los 46 debe ser la edad en la que los geek nerds asentamos la cabeza, je je.

Con esto no quiere decir que mañana me vuelva a entrar el ansia viva y me lo compre todo.

En fin, es lo que hay. Y con esto he llegado a las mil novecientas sesenta y cuatro palabras.

Por RFOG | 7 Comentarios | Enlaza esta entrada
contacto@wintablet.info tema WinTablet.info por Ángel García (Hal9000)