Me ha vuelto a llegar noticia de la campaña de supervivencia de James Kendrick. Los veteranos de tablet PC o de computación en movilidad puede que os acordéis de jkontherun, un blog pionero en estos temas. Dicho blog fue comprado por un gran agregador de blogs, y finalmente en el pequeño colapso de los blogs profesionales fue extinguiéndose hasta la desaparición.

James había sido un técnico de prospección petrolífera. El primer infarto le apartó de ese trabajo y decidió dedicarse a los blogs. Eso no amerita mucho comentario… Si no llega a ser porque un freelancer no puede pagar los bestiales costes de un seguro sanitario en EE.UU.

El hombre desarrolló una diabetes que le ocasionó unos gastos cada vez más difíciles de asumir. Finalmente llegó un segundo infarto y, con él, gastos sanitarios que le han llevado a la ruina.

No es el primer caso que conozco. Un editor de una de las revistas mar importantes de computación americanas tuvo un accidente entre trabajos y pasó en un año de una casa grande a una caravana. Todo, por los gastos sanitarios.

Es una basura. En un país rico y desarrollado, es moralmente inaceptable que la mala suerte con la salud conlleve, además, la ruina de todas una familia. No hay elección posible entre el dinero de la familia y la vida de los padres o de los hijos

Cómo hace años, le he vuelto a donar por su campaña. Su blog me hizo aprender mucho en su momento (y éste no es el momento para criticar su deriva). No pago un céntimo a los blogs de divas lloronas que sollozan o patalean porque no pagamos por leer sus inmortales textos. Hay toda una internet para leer de autores no llorones. Pero a James, sí. No está lloriqueando, sino mostrando su intimidad como último recurso. No empatizo con el llorón, pero sí con un caso así… Que no puede pasar en España.

En nuestra España novisecular y capitalista, la ruina puede ocurrir. Te pueden deshauciar y aún así mantener la deuda. Eso, en USA, va mejor. Puedes perder la casa pero la deuda se queda con las llaves.

Pero lo que no puede pasar es que una desgracia se multiplique en dos. Que un problema de salud te lleve a la ruina. Sin ir más lejos, ayer mi nene se escalabró. Ambulancia, hospital, 4 puntos y a casa. 3 horas de espera porque hay demasiado hijo de puta que abusa de las urgencias, pero no quiero abundar en el tema que me engorilo. Lo importante es que pago mis impuestos y,por ello, esa atención no me costó un céntimo. Ya os digo yo que eso en EE.UU. no es posible, a veces aunque tengas seguro.

El país más rico no debería consentir esto. Y nosotros, con una esperanza de vida sensiblemente más larga, no debemos llegar a eso. El sistema sanitario tiene que mejorar, claro. Eliminando en lo posible los abusos de los hijos de perra que van a urgencias para saltar las listas de espera que esperamos los tontos, para empezar. Pero hay que mantener a toda costa la calidad y universalidad del sistema de salud para todos los españoles o residentes legales.