Windows 8 trae desde ya la opción de resetear el equipo. Y aquí por resetear no nos referimos a esa interrupción momentánea de la corriente que limpia la RAM y detiene todos los procesos obligando a cargar todo de nuevo. No, nos referimos a ponerlo todo como si hubiera salido de fábrica.
Esta opción puede ahorrarte mucho tiempo cuando tu equipo haga “cosas raras”. Lee y aprende.
Síguenos