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Nov 2016
Podcast

La lejía Neutrex y el blanco nuclear

Supongamos una vaca esférica. Calculemos su volumen. ¿De qué color es la cuadra en donde duerme? Un oso sale de su casa, se da un garbeo por su territorio y vuelve a ella. Supongamos que el oso es esférico para calcular el trayecto. ¿Se cruzó con una ardilla?

Efectivamente, volvemos al NaNoWriMo y no, no me he vuelto loco. Pronto veréis con qué tiene que ver todo esto. Había una vez un iPad Pro. Y un MacBook Pro. Y una Surface Pro. A Chulilla no le gusta la palabra “PRO” si no va acompañada de unas especificaciones, digamos, ejem, pro.

Ahora pasemos a contar una parábola.

¿Recordáis ese anuncio de la tele en la que se decía que las cosas lavadas con esa lejía tenían un blanco nuclear? Bueno, realmente no me acuerdo si era Neutrex o NuSu, pero había un anuncio televisivo que decía algo así.

Sabéis qué dice el Diccionario de la Real Academia sobre la palabra “nuclear”? Pues trae cuatro acepciones, una de ellas marcada como relativa a la física. Y viene a decir “Perteneciente o relativo al núcleo de los átomos”. La primera se resume como “perteneciente o relativo al núcleo” y las dos últimas hacen relación con la energía atómica de fisión o fusión o que emplea energía nuclear.

Ahora seamos literales.

¿Os imagináis lavando algo con esa lejía? Ya me veo yo a la señora María dentro de su traje antiradiación, metiendo la ropa en la lavadora y luego echando un chorrito de la cosa esa en el cajetín de la lejía. Con unas tenazas de más de medio metro de largo, claro.

Me pregunto si la lavadora aguantaría todo el proceso o reventaría como lo están haciendo ahora mismo algunas de Samsung.

Luego, después de lavar la ropa, claro, viene la fase de descontaminación. Habría que meter en salmuera como poco cien años la camiseta, la lavadora, las tenazas, y el alcantarillado completo hasta donde llegara el agua del enjuague.

Y no debemos olvidarnos del traje de la señora María. Y como conocemos lo cotilla que es y se asomó al bombo durante el lavado, también tendríamos que salmuerarla. Creo que cuando ya se le hubiera pasado la contaminación radiactiva, la mujer estaría ya un poco pasa. No creo que aguantara un asalto de su esposo, ansioso por echarle un tiento cuando la devolvieran a casa…

Supongo que todos conocemos el concepto de metáfora. Esa lejía lo que nos quiere decir es que produce una ropa de un blanco que destella, que brilla por sí solo de lo blanco que es. Por supuesto a ese anuncio hay que añadir prácticamente todos los que salen en la televisión, y si son de productos de limpieza, más todavía.

Si mi madre viera entrar a tamaño tío, me refiero al de Don Limpio, a mirarle cómo ha dejado el suelo de la cocina con un algodón, te digo yo a ti que rápidamente se le quitaban las ganas de ir por casa ajena metiéndose donde no le llaman. Pues no es ella rápida con la zapatilla, más que Chuck Norris dando patadas voladoras y desenfundando y vaciando el cargador sobre los malos. Que sí, que te lo digo yo, que he sufrido el efecto de su calzado, algunas veces en modo ataque dron. Ni a desviarme me daba tiempo cuando la alpargata volaba en mi dirección.

Sin embargo nadie protesta. Nadie demanda a Neutrex porque el contador Geiger sigue sin crepitar tras lavar una camiseta con ella, o a Don Limpio porque ha estado dos días, en bata y sin nada debajo, esperando al grandullón ese a que le pase el algodón y lo que se tercie, ya puestos. Ni tampoco porque pases tu mismo el algodón por el suelo justo después de fregarlo y recoja alguna que otra mancha.

Por lo tanto, que un producto lleve la palabra “pro” realmente no significa nada. Es el nombre que el fabricante ha decidido ponerle. Como si lo hubiera llamado “mega chupi super iPad pro”. Simplemente es una etiqueta.

Todos sabemos qué significa Windows. Hasta donde yo sé, Windows no trae ventanas, en el sentido de que no es una ventana, con su cristal y sus hojas que abren y cierran. Es una metáfora. La metáfora de la ventana como elemento cuadrado sobre el que tu te asomas y ves el interior. Ni más ni menos.

Pues lo mismo con Pro. Es evidente que quieren que se trate de una abreviatura de profesional. Es decir, es un iPad profesional, y una Surface profesional.

El DRAE también nos trae una definición de “profesional”, por si no lo sabías. De hecho tiene hasta cinco acepciones, todas ellas en relación a realizar una actividad o profesión, excepto la última que nos dice “hecho por profesionales y no por aficionados” (y es aquí cuando oigo el “¡Ajá!” del amigo Chulilla.

Veamos qué significa profesión.

La cuarta acepción es “ceremonia eclesiástica en la que alguien profesa en una orden religiosa”. No me negaréis que ser un fanboy de Apple y adorar a tu iPad Pro no cualifica mal el nombre. Y si ahora buscamos la palabra profesar… la mitad de las definiciones tienen que ver con el sentimiento, religioso o no. Incluso profesar puede significar cumplir tus votos religiosos. ¿No sienten amor hacia el iPad Pro los que lo profesan y les gusta?

Hay más acepciones, claro. Están las de enseñar o ejercer una profesión, oficio o arte. Es decir, un iPad Pro (o una Surface Pro) son elementos que sirven para enseñar o ejercer una profesión, oficio o arte.

Por lo tanto, pro de profesional en el sentido de “para el profesional” como nosotros lo entendemos no deja de ser una de las cuatro acepciones más generales.

Por lo tanto, si nos ponemos quisquillosos, cada cuatro iPad (o Surface) PRO vendidos, tres están destinados a fomentar o tener un sentimiento religioso y un cuarto para desarrollar labores de profesión, oficio o arte. Como el cuarto final se reparte entre tres diferentes destinos, y solo dos tienen relación con el profesional currante, de cada doce dispositivos vendidos, solo dos van destinados a ellos.

Creo que se cumple la regla si englobamos a los putos fanboys de Apple (ojo, y de Microsoft) como fomentadores de sentido religioso y el resto para uso no artístico.

Si a eso encima añadimos el tema de la metáfora, ya entramos en el acabose. A ver, que da igual que se llame pro, sumer, culito o con alas: no deja de ser un dispositivo para ser utilizado. Si cumple tus espectativas, da igual que sea pro o sumer, y si no las cumple, también.

No sería la primera vez que un ve a un alto ejecutivo vestido de traje Armani con zapatillas de deporte montado en el equivalente norteamericano del Vespino de 49 cc.

Si a él le va bien, pues perfecto. Si a ti te va bien una Surface Pro 4, o 3, pues perfecto. Y si te va bien un iPad, tenga el nombre pro, aire, o plus con mol.lecul.las más pesadas que el aire, digo, que si te funciona y cumple lo que tu quieres que haga, miel sobre hojuelas e hijo de puta el último.

O como dijo aquél, ande yo caliente, como si te la pica un pollo.

Sinceramente me molesta bastante que la gente se fije en la etiqueta y no el contenido, o que por llevar tal o cual nombre ya uno deba ser así o asá. Recordemos que hubo un tiempo en el que si tenías pene te tenían que gustar, sí o sí, las mujeres, y si se descubría que te gustaban los penes lo mejor que te podía pasar era que te castraran químicamente. De ahí hacia adelante.

Por lo tanto no me gusta mirar a las cosas por su etiqueta. La etiqueta es una forma de poder hacer referencia a algo, no el algo en sí. Imaginad que hubiéramos llamado coche a una montaña. ¿Cambia eso el hecho de que una montaña sea una montaña el hecho de que la hayamos llamado coche? Pues no.

Lo mismo pasa con esto. Realmente da igual como se llama. Lo que importa es lo que es (y de eso hablaré en una próxima entrada) y lo que hace. Punto. Lo demás son pajas mentales.

Y ahora la traca final.

Vayamos ahora con la palabra “pro” igual que hemos ido con “nuclear”. ¿Qué significa según el DRAE? Pues solo nos trae dos acepciones. La primera es “ventaja o aspecto favorable”, y la segunda “provecho o utilidad”.

Ahora vas y lo kaskas. Básicamente te está diciendo que un dispositivo “pro” es algo que cuenta con una ventaja o aspecto favorable y/o que es de provecho o utilidad.

¿Alguien puede negarme que el iPad Pro, o la Surface Pro no cumplen su nombre? Pues hala.

PS: No me toméis muy en serio con esta entrada. Por si no os habéis dado cuenta, es una humorada con algunos pinchos aquí y allá. Y con esto, otras mil quinientas diez palabras más para el NaNoWriMo.

Por RFOG | 4 Comentarios | Enlaza esta entrada
contacto@wintablet.info tema WinTablet.info por Ángel García (Hal9000)