¿Conoces la historia de muchacho que revolucionó el mundo sentando las bases de nuestra tecnología?

En WinTablet.info rendimos homenaje a George Boole, matemático del S. XIX que con su aportación ha moldeado drásticamente nuestro estilo de vida, tecnología y sociedad.

Merecidamente, se habla de grandes inventores y descubridores que cambiaron el mundo. Los hermanos Wright, el matrimonio Curie y el bueno de Pasteur son de los más famosos, pero hay muchos que no se les conoce fuera de su ámbito, y a veces ni eso. Gracias a uno de ellos tenemos ordenadores, podemos sacar dinero de un cajero automático y las puertas del supermercado se abren a nuestro paso. Estamos hablando de George Boole, matemático inglés del siglo XIX. Ya que se cumple el 165 aniversario de la publicación del álgebra de Boole, le rendiremos un merecido homenaje.

BOOLE, EL LEGADO

Corría el año 1846 y en los círculos intelectuales estalló la controversia conocida como «la cuantificación del predicado».

Por un lado, el filosofo y erudito William Hamilton sostenía que la lógica era una parte de la metafísica, siendo las matemáticas (a las que tenía mucho asco) una parte de la lógica. Al otro lado, el matemático Augustus De Morgan sostenía lo contrario.

De Morgan contra Hamilton, el combate intelectual del año. Menos mal que no apostaste por ninguno, porque ganó otro...

Sin embargo fue un joven matemático de 32 años quien puso fin a la disputa. A George Boole, amigo de De Morgan, le bastaron unos meses para publicar un  panfleto titulado «Análisis Matemático de la Lógica».

El papel ha plasmado las ideas que han revolucionado el mundo. He aqui un ejemplo.

No solo dejo en evidencia los fallos de Hamilton, sino que demostró que la lógica podía guiarse gracias a formulas matemáticas. Lo que seguramente no sospechaba el bueno de George, es que ese fue el principio de la computación moderna.

Cierto fue que no inventó ningún artilugio, pero ni falta que hacía. Había sido el genio que inventó las herramientas para que otros que viniesen detrás pudieran serlo. En la escalera de la informática moderna, el primer escalón fue el Álgebra de Boole. Sin esa base, todo lo demás, sencillamente, no habría venido.

No fue el primero que intentó reducir la lógica a ecuaciones matemáticas, pero fue el que lo consiguió, y gracias a eso estás leyendo esto...

Mas tarde, en 1854 publicó «An Investigation of the Laws of Thought» en el que desarrollaba un sistema para plantear y resolver problemas lógicos. Los resultados de los problemas daban una solución de dos posibles, verdadero o falso.

¿Os suena de algo? Exacto, los famosos unos y ceros.

¿Podría considerarse la primera revista informática de la Historia?

A simple vista, esto no parecía tener mucha utilidad práctica en el siglo XIX, como de hecho, así fue. Pero el trabajo de Boole no iba a quedar en el olvido. Setenta años después de su muerte, Cleaude Shannon, experto en computadoras analógicas, tomo contacto con el álgebra en los años treinta. Se dio cuenta que dichas fórmulas se podrían aplicar a circuitos eléctricos, simplificando enormemente su diseño. Asimismo, los relés podían resolver los problemas matemáticos de dicha algebra. Se dio cuenta que este seria un material magnifico para su tesis, que escribió en el verano de 1937. Dicha teoría encontraría su practica en el enroutamiento de las líneas telefónicas. Había nacido la era digital.

Cuatro años después se ponía en marcha la Z3, la primera computadora propiamente dicha. Y el resto, fue historia.

La Z3. Tecnología alemana. Espíritu inglés. Nótense los armarios llenos de relés...

El impacto de George Boole en la Humanidad es inconmensurable. ¿Os habéis parado a pensar en como modificó nuestra sociedad?

Gracias a la aplicación practica de su álgebra, combinadas con las ideas de otros genios, nuestro mundo jamás volvió a ser el mismo.

Las comunicaciones sufrieron un avance espectacular, sobre todo a partir de cuando se empezó a digitalizar la información. Ahora puedes sacar dinero de cualquier banco gracias a la centralización de las bases de datos, o saber que tiempo hará mañana gracias a unas imágenes digitales de un satélite meteorológico.

La primera imagen de Marte fue pintada a mano. Como no había manera de traer los carretes de la cámara de la sonda Mariner 4 de vuelta a la Tierra, el ordenador sacó una foto, la dividío en puntos y les asigno a cada uno un numero según su color/intensidad. Los ansiosos tecnicos, imprimieron los numeros y pintaron con ceras de colores encima.

Avanzaron tanto que ahora tenemos cada uno nuestro propio teléfono en el bolsillo.

La industria también dio un salto de gigante. Gracias a la automatización, se abarataron los costes de producción, al mismo tiempo que subía la calidad. El resultado es una clase media con acceso a artículos que antes eran de lujo. Antaño los relojes eran para la gente rica, pues eran autenticas obras de artesanía. Ahora coges un trozo de cuarzo piezoeléctrico, le metes corriente, le pones un contador y… ¡Voila! Tenemos un reloj mas barato, mas preciso, mas ligero y duradero.

También mejoro nuestra calidad de vida, gracias a la seguridad. No solo las máquinas pueden liberar al hombre de tareas peligrosas. Sistemas ambientales mantienen una atmósfera saludable en un parking de manera eficiente, o un diminuto procesador de un ABS calcula la manera de detener una rueda sin bloquearla.

Transportes, fabricación, medicina… Te reto a que mientras lees esto, mires cualquier cosa de tu alrededor, a ver su ves algo que no se halla fabricado con la aplicación de este algebra. ¿El baso de lápices? Una maquina con CAD CAM hizo el molde. ¿La mesa? Maquinas lógicas cortaron las piezas, o intervinieron en la fabricación de las herramientas que las hicieron.  ¿La pared? Una maquina mezclo los colores para la pintura.

Es mas, los ingredientes de la comida de hoy han sido tratados, envasados, etiquetados o distribuidos por máquinas lógicas guiadas por las ecuaciones de Boole.

Si quieres estar 100% seguro de ver algo artificial que no haya sido influido por su algebra, vete a la playa y haz un castillo de arena con tus propias manos (con un cubo no vale). Son tantas aplicaciones, que podríamos estar hablando del tema hasta el infinito.

BOOLE, EL ÁLGEBRA

No podemos hacer un homenaje a George Boole sin hablar un poco de su álgebra.

No creas que vas a leer este articulo y vas a ser un experto, pues no es este el propósito del articulo y es algo muy largo de explicar. Sin embargo, puedes aprender las cuatro funciones básicas y como se aplican.

El sistema binario tiene dos dígitos, 1 y 0. Esos dígitos pueden interpretarse como Estados en un circuito eléctrico, siendo 1 encendido y 0 apagado.

Las cuatro operaciones básicas son las llamadas SI, NO, O e Y.

Las mas fáciles son las primeras. SI es encendido, y NO se comporta del revés. En realidad, la función NO es una función SI solo que negada. Las funciones negadas son fáciles de reconocer, pues tienen una rallita horizontal encima. Mira la siguiente ilustración para verlas. Tienes su símbolo, su representación con interruptores eléctricos y una tabla de la verdad con todas las combinaciones. Cada 0 representa «apagado» y cada 1 «encendido». Como podrás ver, este tipo de puertas son de un bit.

Y es una función de dos bits, pues tiene dos variables. Hacen falta que todas las entradas sean 1 para obtener un 1. Cualquier otra combinación da 0. O también es de dos bits. Da un valor de encendido si recibe una señal u otra en cualquiera de sus variables. Mira todas las combinaciones posibles si no te lo crees.

Y podriamos seguir y seguir, pero no es el objetivo de este artículo. Las funciones OR y AND, si las negamos tenemos las NOR y NAND. Por ahí también anda la XOR, que es una OR exclusiva.

BOOLE, EL HOMBRE

¿Y que podemos decir de ese chaval brillante? George Booule fue un matemático que nació un 2 de Noviembre de 1815. Su padre le inculcó el amor por las matemáticas, y cuando le empezaba a salir la pelusilla por la cara ya era sextalingüe.

A Boole le apasionaban los números, pero sus padres solo podían pagarle un colegio normal y corriente. Así que George, ni corto ni perezoso se hizo autodidacta.

Cuando salía de la escuela, se pasaba las tardes estudiando libros de matemáticos franceses por su cuenta. Gracias a sus estudios sobre los trabajos de los grandes, las matemáticas avanzadas le eran tan familiares como respirar.

Cuando tenia 20 años, la economía familiar pasaba por una mala racha, así que fundó su propia escuela para arrimar el hombro.

Parece ser habitúal que los grandes genios en la intimidad son o hayan sido déspotas, tiranos o le hayan puesto los cuernos a su mujer. ¿Como era George en la intimidad?

La personalidad de Boole fue suficiente para inspirar en sus amigos una profunda estima, eso por si solo ya dice mucho.

Además, no tenia un ego desmedido, ni profesaba el culto a su persona, sino todo lo contrario. Una de sus características era la modestia. No era un visionario que pretendía cambiar el mundo haciéndose rico por el camino (cosa por otro lado, totalmente legítima).

A pesar de que recibió una medalla de la Royal Society por sus memorias de 1844, y el doctor honoris causa en Derecho de la Universidad de Dublín, ni pidió ni recibió el dinero al que tenía derecho. Sus matemáticas, en especial su algebra, fueron un regalo altruista a la humanidad.

Tal era su afán por la búsqueda de la verdad, que era famoso por su imparcialidad. De hecho, era un árbitro habitual cuando habían controversias y disputas.

En 1855 se casó con la joven fascinada por las matemáticas Mary Everest (si, Everest, como el monte. Dicho monte fue nombrado así en honor del cartógrafo George Everest, su tío. Dios los cría y ellos se juntan).

Al parecer se llevaban muy bien, y el sabia valorar sus aptitudes intelectuales, pues le ayudo con el libro de Las Leyes del Pensamiento.

Fruto de su amor tuvieron cinco hijas, aunque con semejante carga genética, sus descendientes no serian cualquier cosa. Una de sus hijas fue la primera química de Inglaterra, pero los logros de los descendientes Boole no se quedarían ahí… Miembros del Royal Society, profesores de cirugía, teóricas de la geometría en cuatro dimensiones, autores de libros super ventas… ¡hasta miembros del proyectos Manhattan!

Mary Boole (en el centro) junto con hijas y nietos. A pesar de sus apellidos, muchos de ellos brillaron con luz propia en varios campos.

Lamentablemente, el 8 de Diciembre de 1864, sufrió un ataque de fiebre que le encharcó los pulmones, causándole la muerte.

En sus 49 años de vida consiguió ser un pilar para los que lo rodeaban, y la base de la tecnología de hoy.