Decía Goebbels que no hay mentira que no pueda convertirse en verdad si se repite suficientes veces. Y en estos meses estamos asistiendo a una de esas mentiras, meme negro o como lo queramos llamar – Windows 8 se utiliza mal sin pantalla táctil. Debe ser que estoy abducido, porque mi máquina principal de producción es un desktop sin tactilidad alguna, que manejo con Windows 8 con más fluidez que con Windows 7 debido a los extras que me ofrece la pantalla de inicio. Sea como fuere, con un dispositivo de 75$ se va a poder manejar una máquina con Windows 8 con todos los charms en modo táctil, y con la misma precisión que si se apoyaran los dedos en la pantalla. O más.
Leap Motion promete una revolución en el manejo de ordenadores. Tras la estela de kinect, ofrece una detección de gestos con una precisión y a una velocidad de refresco tremendos, que en la práctica lograrán una respuesta completamente fluida para toda interfaz que pueda recibir comandos de gestos.

Ustedes dirán que OSX, por ejemplo, admite gestos con el touchpad. Algunos más que los portátiles con Windows 8, seguro, con dos y tres dedos. Pero la interfaz básica de OSX es la misma que hace 10 años, y necesita teclado y/o ratón para funcionar, porque tienes que apoyar un puntero en el punto preciso o invocar combinaciones de teclas. Lo de Windows en versiones anteriores a 8. Lo de cualquier gestor de ventanas de Linux o *nix.

Pero la estupidez repetida ad nauseamediting essaysm> de que Modern UI sólo funciona bien con una pantalla táctil se da la vuelta con la llegada de LeapMotion (o las mejoras esperadas para Kinect). En otras palabras: se puede manejar perfectamente con teclado y ratón, pero no está orientada a un manejo tan preciso como el de la GUI clásica. Tanto la pantalla de inicio de Windows 8 como las aplicaciones diseñadas para RT funcionan mejor con input táctil (o gestual, como es el caso de LeapMotion) que los OS anteriores.