Creo que ya debe resultar un poco tedioso eso de anunciar la nueva tableta de Microsoft, así que mejor vamos a comentar algunos detalles sobre la misma, cosas que me han gustado y cosas que no.

En principio, cuanta más variedad haya, mejor para el usuario.

Y ahora, démosle leña al mono, que es de goma.

El lector puede encontrar en otras entradas de este blog las características de la tableta, sus propiedades y su rendimiento. Yo solo voy a hacer algunas puntualizaciones que considero importantes.

La primera de ellas es el botón de inicio. ¿Quién ha dicho que no hay tal en Windows? Está, es físico y se sitúa, ahora, a la derecha del aparato. Por fin uno va a tener que dejar de retorcer la mano de extrañas formas cuando quiera pulsarlo mientras la tableta se apoya en la barriga (ya sabéis, trabajo/ocio desde el sofá, cosa a la que uno es muy aficionado).

Ahora uno tendrá que tener un poco más de cuidado cuando la sujete, pero solo un poco, porque como todo usuario de iPad sabe, el botón a ese lado no molesta nada, incluso en el Air que tiene el marco más estrecho.

Otro de los detalles a destacar es el formato de la pantalla. Ya no es panorámica, si no que tiene la forma más o menos rectangular de un portátil. Eso significa que ya no es tan ancha como las versiones anteriores, por lo que, por fin, va a resultar mucho más cómodo trabajar con ella.

Tiene cojones la cosa que hayan tardado tres versiones a darse cuenta de ese hecho. Sólo tenían que haber cogido una y haberla usado un par de días para haberse dado cuenta del hecho de que una pantalla tan ancha solo sirve para ver películas, y como todos sabemos, no solo de eso vive el hombre.

También tengo que añadir que me parece estupendo que hayan encontrado un hueco entre el nicho del portátil y el de la tableta. Recordemos que Samsung tiene una, también, de 12 pulgadas y sinceramente, no resulta tan tocha en las manos, sobre todo cuando estás viendo un PDF A4 (no, no la tengo, lo hice en una tienda Samsung).

Esto es como las lentejas, si quieres las tomas y si no las dejas. Si te gusta, la compras. Si no, pues no lo hagas. Personalmente creo que esta tableta cubre un hueco perfecto, que es el de ejecutivo de medio y alto nivel que viaje continuamente y necesite un portátil de prestaciones decentes. Un aparato así suele pesar entre el quilo y medio y los dos quilos y medio. La tableta pesa ochocientos gramos, pongamos cien más del teclado y otros tantos de los complementos.

Un quilo frente a dos o tres en la mochila se nota, y no poco.

Otro nicho podría ser el profesional independiente que visita al cliente y le enseña el estado del proyecto. Imaginemos un diseñador gráfico que enseña su cartel recién creado. El cliente lo ve y le dice que ese color le gusta más claro. El diseñador toca aquí y allí y el color cambia. El cliente da el visto bueno y, de ahí, a la imprenta.

Eso serían 800 gramos. Las otras opciones son dos quilos de portátil o “lo cambio en la ofi y te envío un JPEG con el resultado” (o vuelvo). O lo que es peor, cambiar el color, irte a por un café y volver a ver si ya se ha aplicado.

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Vale, hasta aquí lo positivo. Ahora va la leña.

Como estuve de viaje (con por cierto un portátil de casi tres quilos porque debe ser capaz de desarrollar para Windows Phone), el evento lo vi en diferido ayer, lo que, junto al hangout del jueves, y alguna que otra review por ahí, resolvió todas mis dudas.

He de decir que la única parte interesante fue la de Nadella justo al inicio. Porque habla mejor inglés que el Panay, que parece que tenga algo sucio en la boca, y porque este me resultó demasiado jobsiano.

Hay que joderse con esto. La mayoría de eventos son intentos de copiar lo que hacía el citado. Hoy en día todo es maravilloso, mágico y su puta madre. Pues no, todos cagamos, nos tiramos pedos y los ordenadores se rompen.

Me toca mucho las narices este calco. ¿Tan jodidamente ineptos somos que no somos capaces de ser nosotros mismos, o de idear una forma diferente de hacer las cosas?

Microsoft copia a Apple, pero la copia mal. Recuerdo los tiempos de la salida de Windows Phone 8. Copió a Apple en lo del hype y en lo de los rumores, pero también sacó de quicio a la gente con la negación del SDK antes del día señalado.

Hay que ser muy tonto para no darse cuenta de que Apple lo hace justo al revés. Se calla como una puta y no suelta prenda, lo que en lugar de hacerte salir de quicio hace que andes a la expectativa. ¿Qué sacarán? ¿Qué será? ¿Cómo será? No, Microsoft te dice lo que va a sacar pero no te lo enseña.

Aquí ha sido más de lo mismo. Mucha expectativa, mucho hype pero justo al revés. Te enseño lo que no querías pero lo que querías no te lo enseño, y encima te aburro como una ostra durante una hora.

En fin, es lo que hay.

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También me di cuenta de otra cosa, y es que cuando las cámaras apuntaban al público, solo se veían MAC. Y encima en su versión PRO de 15 pulgadas. Si eran de menor tamaño o la versión Air, es que los que estaban detrás del teclado era gente muy chiquita. Ni un portátil Windows, y menos aún una Surface.

¿No te indica eso algo, Microsoft?

El primer error del evento es que la comparación no debía haber sido hecha con el Air, sino con el PRO. Más bien con el PRO Retina, que es el que tiene simulares características. Pero claro, entonces eso de la balanza queda menos efectivo.

Sin embargo, si sacan un Air, hacen lo de la balanza y empiezan a darle caña al PRO, otro gallo cantaría.

Lo que refuerza mi tesis de que no hay que copiar mal, hay que seguir su propio camino. También lo dicen los aplausos. Pocos “ohhhhh” escuché, pero pocos pocos.

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La duración de la batería no está mal, pero tampoco bien. Si se vende como un equipo de trabajo, ocho o nueve horas son suficiente. Aunque habrá que ver qué tipo de trabajo. ¿Duraría la batería ese tiempo desarrollando y compilando? Lo dudo mucho. Y tampoco lo voy a comprobar.

Sin embargo, un equipo vendido para ocio + trabajo debe durar las ocho horas del curro más las cuatro o así de ocio. Si sumas te da doce horas.

¡Anda, si es lo que le dura la batería al Air! ¡Qué tontos, estos de Apple!

Volvemos a lo de antes, si lo hubieran comparado con el PRO Retina, son cinco frente a ocho.

Pero no, es el Air.

Más puntos para mi tesis.

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¿Queréis echaros una risas conmigo? Tres pilas. En el Stylus. Sí, el Stylus necesita tres pilas para funcionar. DosUna AAAA para el puntero y otrados de botón (como las de los relojes) para el botón (valga la rebuznancia) de atrás.

Gracias, Mahjong, por darnos el chivatazo. Espero que salgas pronto de tu bucle de estupor. Mi PetaZetas dijo algo parecido cuando se lo comenté: “Qué cutres”.

Cutres no, lo siguiente. Hay que ser muy tarado para hacer algo así. Es increíble. Increíblemente estúpido.

Por eso es un palito tan gordo. Gordo de cojones. Y por eso no lo integran en la carcasa. Esa es otra que no tiene nombre.

Lo integran en el teclado, algo así como una idea de última hora:

-Oye, tú, ¿qué hacemos con el palito?

-Pues le ponemos una arandela al teclado y listo. Así cuando no tengan el teclado a mano tampoco tendrán lo otro.

En fin, creo que solo por eso, un equipo increíble se ha convertido en algo del montón. Y eso sin contar cuánto duran. A ver si vamos a tener que cambiarlas cada semana.

En fin, un error garrafal que desmerece, y no poco, a un producto increíble.

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Ya para terminar, otro tema que nos enlaza con la supuesta mini que según los rumores se dejó de presentar porque no aportaba nada nuevo. Menos mal que se han dado cuenta, que si no…

¿Sabéis por qué Windows 8 y las Surfaces no terminan de despegar como tabletas?

Sí, las aplicaciones. Pese a lo que diga Ctitanic, la mayoría de aplicaciones son una mierda, y el navegador es eso, un navegador.

La mini no salió porque no se puede hacer nada con ella si lleva un ARM (Windows RT). Nada realmente útil y productivo, y no me refiero al punto de “generación de contenidos”, sino al de “consumo” de los tales.

Con las cutre-aplicaciones que hay en la tienda de Windows 8, poco se puede hacer.

Os lo dice alguien que lo intenta al menos una vez por mes. Intenta dejar su iPad, se coge sus Surfaces, y antes de los dos días las ha vuelto a dejar dormir el sueño de los justos.

Hay un dicho entre informáticos, o más bien una regla que dice “eat your own shit”, cuya traducción literal es “cómete tu propia mierda”, y el sentido real es que el programador debe usar el mismo programa que está desarrollando.

Con esto me refiero a que los que mandan en Microsoft deberían coger una tableta e intentar usarla todo el día sólo con la interfaz Metro. Utilizar las aplicaciones que vienen de serie y las de terceros.

Ayer lo hablaba con un colega del trabajo. Apple primero utiliza sus propios SDK de forma interna, creando aplicaciones con estilos y funcionalidades que no están disponibles de forma externa para terceros desarrolladores y, cuando todo funciona bien, lo meten en un SDK y lo hacen público.

Microsoft hace justo lo contrario. Te saca un SDK con un montón de funcionalidad que sólo ha sido verificada a nivel de QA, pero ellos siguen utilizando sus herramientas internas, de modo que son los programadores externos los que se enfrentan a unas herramientas mal terminadas, con problemas bastante serios y a veces a bugs kafkianos que no deberían ocurrir o que, de hacerlo, se los deberían comer los mismos que han construido dicho SDK.

Después de los tres párrafos de anteriores sólo me queda hacer una puntualización: a ver si Microsoft copia de una puta vez lo que tiene que copiar de Apple.

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Me entristece mucho que no sean capaces de ver esos grandísimos problemas. Me refiero al stylus y a la carencia de aplicaciones. Es algo que Apple solucionó (y soluciona) con elegancia, y que tengan la estupidez de copiar lo malo y no lo bueno.