Como ya sabréis, el lunes llegó mi Surface PRO 3 de 256 GB desde USA. Ahora estoy a la espera de la llegada del teclado, que compré aparte en la tienda española, pero mientras lo recibo puedo comentaros bastantes cosas sobre la tableta/ultrabook.

Así que… ¡leña al mono, que es de goma!

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Nada más llegar la abro y caigo en la cuenta de algo. Mirad la foto:

Miro la hora y salgo corriendo. A la segunda ferretería encuentro el adaptador (la primera estaba cerrada por vacaciones), y mientras vuelvo a casa me doy cuenta de algo: que tengo un cargador prácticamente idéntico y que el cable con la clavija es intercambiable. En fin.

Lo segundo que miro son los valores del cargador. Como era de esperar, vale para Europa ya que soporta tanto los 50 como los 60 hercios, así como 110 y 220 voltios. Sí, ya sé que es tontería, pero tenía que mirarlo para asegurarme. Ya conocéis el refrán de gato escaldado del agua fría huye. Y son 1300 ñapos del ala. Más vale prevenir que curar. Etc..

Enciendo, espero y primera bofetada en plena cara: se ve horrible, el texto es completamente pixelado. El ventilador se pone a girar a tope. Se calienta mucho, hasta el punto de tener que dejarla en la mesa. Empezamos bien.

Tras más de diez minutos de “estamos haciendo cosas”, “estamos haciendo todavía más cosas”, “espera que todavía queda algo más”, “como aún no te hemos tocado los cojones lo suficiente, espera otro poco”, ¡tachán!, todo listo. Bueno, no, se reinicia actualizando no se qué del firmware.

Finalmente sí, finalmente ya la tenía lista, cosa de media hora después de haberla encendido por primera vez, a tope de temperatura y de ventilador, y con tan solo un 20% de batería restante, así que la tuve que poner a cargar al poco.

Experiencia de usuario Microsoft. Como la de Apple. En fin, es lo que hay.

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El lunes tuve poco tiempo para experimentar, porque me tiré todo el día instalando y actualizando cosas. Hubo un momento en el que tenía actualizaciones en Windows Update pero estas no entraban por un código de error que no estaba documentado en ningún sitio. Tras varios reinicios al final se instalaron poco a poco.

Ese día estuvo toda la tarde caliente. Es cierto que la temperatura ambiente era alta, pero pusimos el aire acondicionado un rato y siguió caliente y con los ventiladores haciendo ruido. También es cierto que estuvo copiando archivos, de Windows Update, instalando Office (no, no creo que le acerque Visual Studio ni jarto vino). También jugué un rato con el palito. Curioso que el doble clic para capturar la pantalla solo funcionó al cabo de un rato.

Lo más destacable de esa tarde/noche fue lo caliente que estuvo. Incómodo pero no como mi PRO primera generación.

Al día siguiente tocó actualización de segundo martes de cada mes. Nada más llegar a casa de trabajar, tuve el hangout sobre la keynote de Apple, pero luego me dediqué a la tableta. La primera en la frente: en el proceso de actualización se quedó pajarito, primero con el ventilador a tope y casi ardiendo y luego a temperatura normal y el ventilador más o menos despacio. Y luego se apagó la pantalla y no reaccionaba a nada.

Durante unos veinte minutos. Luego revivió ella sola cuando estaba acercándome al MAC para iniciar los trámites de sustitución o incluso intento de devolución…

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Vale. Una de cal y otra de arena. Arriba he comentado los inconvenientes. Ahora lo otro.

SI hay una cosa que se pueda decir de la SP3 es

¡¡¡¡¡pantallacaaaaaaaaa!!!!!

Se ve que en el proceso de instalación no estaba activo el suavizado de fuentes, porque el texto en las aplicaciones es cristal clear. Vamos, que no tiene nada que envidiar a ningún otro cacharro retina display. Se ve algo peor que un iPad, pero solo se nota lado a lado.

Creo que no lo he dicho:

¡¡¡¡¡pantallacaaaaaaaaa!!!!!

Es acojonante lo bien que se ve un PDF en vertical, no te digo ya en apaisado. Las revistas de texto (léase Analog SFF y Asimov’s) en Magzter de ven increíbles a doble página y en vertical ya no os digo. La SP3 no tiene una pega que sí tienen mis PRO primera generación y mi RT segunda generación: la polarización de la pantalla hace que se vea bastante mal en vertical respecto a horizontal. En la SP3 se ve igual de bien en las dos orientaciones.

No obstante, una pantalla tan grande es un poco problemática para verla en modo sofá o cama. Todo queda demasiado cerca, con lo que te la tienes que alejar un poco. Pero vamos, prefiero burro grande ande o no ande.

Una pantalla de ese tamaño también tiene otra contrapartida (si no tienes presbicia): hay muchas aplicaciones que no esperan una pantalla de ese tamaño y muestran las cosas demasiado grandes, a mi modo de ver. De todos modos esto es relativo. Lo que es demasiado grande desde un punto de vista sofing no lo es si la usas como un portátil.

Otra pega son las aplicaciones para leer ebooks. No se terminan de ajustar bien al formato, aunque esto también ocurre con las otras versiones de Surface.

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El rendimiento es acojonante. La primera vez que lanzas una aplicación tarda bastante a arrancar, pero luego ya va muy suelta. Me refiero a la primera vez después de instalar, luego, esté o no esté la app en memoria, se inicia rápido.

Eso no quita que las mismas aplicaciones que petan en mi RT lo sigan haciendo en la SP3. El programa faltón por excelencia es Mail. En mi vida he visto algo tan mal hecho, con tan pocas opciones y con tantos cierres inesperados. La primera vez que lo abres después de no haberlo hecho en unas horas, se cierra solo. Menos mal que carga rápido.

Otra cosa que me saca de mis casillas es el IE en versión Metro. Siempre deja una página en blanco cuando abres desde una aplicación. La primera pestaña tiene que ser una en blanco si no pones tu una de forma manual.

Aunque bueno, estos problemas no son de la SP3 en sí, sino de Windows y la increíble calidad de sus aplicaciones.

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Calor no, gracias. Pese a la de cal, una vez que instalé todo, lo cierto es que no se calienta mucho. Haciendo cosas normales como leer un PDF o el correo, y en un ambiente bastante caluroso, ni se caliente ni el ventilador se pone en marcha.

Cuando haces algo más intensivo, como ver un vídeo, se calienta un poco  y empiezas a oír el ventilador, pero no resulta incómodo ni el ruido ni la temperatura.

Todavía no sé cuánto dura la batería. De momento poco, pero hay que tener en cuenta que he instalado un montón de cosas y le he dado caña.

La pata de cabra ala Surface 3 es el mejor invento desde el pan con aceite. Con eso lo digo todo.

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Entre las cosas que no me molan mucho es el modo standby, que se me está comiendo un 10% de batería cada 12 horas o así de apagado. Eso quiere decir que en cuatro o cinco días sin encender la batería se agotará del todo partiendo de una carga del 100%.

Odio no tener donde meter el puñetero puntero. Ahora lo pego al lado del conector de carga, que más o menos se queda fijo, pero siempre andan dando por culo. Me voy a la habitación y me lo he dejado en la mesa, me voy al salón y está en el dormitorio…

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En general, y para resumir, después de un gran susto, sentimientos positivos, bastante positivos. Ya os iré contando más a medida que me vayan pasando cosas con ella.