Ya sabemos que uno de los motivos por el que no tuvieron mucho éxito los tablet PC fue que había que pagar el doble que por un portátil normal, o casi. Mi Toshiba Portege M202 me costó 2100 lereles de 2004. En los últimos años la diferencia de precio no es tan desmesurada, pero sigue sin invitar a la adopción fuera de los nichos en los que se ha establecido. Mientras, tanto los netbooks con Windows como los tablets con Android han marcado límites bajos en los precios que demuestran que, por debajo de 200$, la compra por impulso se dispara en el mundo desarrollado. ¿Qué va a pasar con los Wintablet en 2012?

Si no hubieran salido los netbooks y los tablets android, apostaría por un ciclo tradicional en el que los early adopters, aka ansiosos, habrían protagonizado las primeras semanas de compras más algún despistado. Pero no es el caso; muy al contrario, los wintablet llegan a unos mercados en los que hay alternativas asentadas y, sobre todo, conocidas por el gran público. Si se quiere vender en números razonables, hay que abandonar el viejo ciclo y aumentar la agresividad.

Leo en extremetech que el wintablet de 200$ lo va a cambiar todo. Y antes de que penséis que me estoy pasando al citarles siquiera, una cadena causal: 1) los netbooks han marcado precios estables de 250 euros, a poco que se ha sabido buscar 2) los tablet ARM están saliendo a ese precio e inferiores sin caer en degeneraciones de acabados ni tripas. 3) Sin Intel quiere competir en este segmento, tiene que apurar más aún los precios para los equipos básicos.

Hasta ahora el WoW factor del iPad hacía que 500 euros pareciera barato, incluso teniendo en cuenta que las primeras horas era raro el que se zumbaba sólo esa cantidad y no compraba varios accesorios y/o la gama siguiente de iPad. Sin embargo, ese precio se contextualiza mejor conforme aparecen alternativas de menos de 200 euros, desde el Kindle fire hasta el Ibm Touchpad, y lo que queda por venir este año. De repente, un dispositivo auxiliar como es el iPad deja de tener un precio mágico.

Si esos 500 euros fueron el precio de referencia de 2011, diría que la mitad va a ser dicho precio (al menos para una parte importante del público objetivo) en el último trimestre del año. Por más que a alguno le parezcan poco 500 machacantes, es evidente que 250 son la mitad, y seis media docena. Los primeros wintablets no podrán superar mucho ese precio si quieren vender en cantidad mínima como para que no haya menciones jocosas como las que se llevó el pobre y excelente playbook de RIM, con ese nacimiento tan problemático y ese precio tan tardío.

En medio de una crisis económica, los gastos pesan y hacen pensar más. En esas condiciones, por más que el todavía nuevo segmento de los tablets siga ascendiendo en su curva de adopción y más y más usuarios quieran adquirir uno, el nuevo precio de referencia hará que la mayoría se decida por tablets menos fashionables, pero usables. Y eso nos lleva antes a las 7″ que a las 9 ó 10, también porque son más utilizables en la calle. En la empresa, disponer de un navegador completo como el que va a ofrecer los wintablet desde su nacimiento o como el que terminará ofreciendo Android cuando Chrome deje de ser beta dan una justificación mayor que la que el iPad sigue ofreciendo para la mayoría de los puestos de trabajo. Y claro, hablamos de los dineros de una empresa: si no se trata de un ejecutivo o directivo, la empresa lógicamente gastará el menor dinero posible en equipos que permitan que el empleado saque adelante su trabajo.

Yo soy empresario. Mi oficina está equipada con desktops que compré en Outlet, core 2 por 230 euros. Son perfectamente capaces, junto con un monitor adecuado, de servir como herramienta para sacar adelante un trabajo. En presentaciones suelo llevar un portátil de calidad, porque es parte de mi imagen. Pero sería un irresponsable si todas las máquinas fueran de gama más alta de lo que necesitan para servir a su función.

Los win

tablet ARM, o WOA, ya están aquí… sólo que sin Windows 8. En otoño, o a inicios de 2013, los sucesores de los tablets Android actuales empezarán a montar WOA además de Android (y quizás alguien acabe montando algo con WebOS, Tizen o los tablet con KDE plasma sigan adelante). La parte de esos WOA destinada a empresa tendrá dos características: a) habrá equipos básicos orientados al trabajo del empleado en movilidad b) habrá distintos equipos adaptados a distintos perfiles de movilidad, desde el ligero y con alta autonomía a equipos más grandes, para creativos o jinetes de despacho. En el último caso, claro, se darán más las dos opciones x86 y ARM, aunque no podemos despreciar el atractivo de poder usar en movilidad (menos de 750gr., 5 horas de autonomía, 400 euros), wintablet x86 con acceso a las enormes bibliotecas de Windows existentes.

Y el lápiz, para acabar de liarla. Wacom seguirá emperrada en meter un sobrecoste demencial a sus matrices, con lo que los verdaderos tablet PC no creo que bajen de 600 euros, a cambio de disponer de El Lápiz. Lo siento, no hay alternativas de esa calidad. Habrá otras tecnologías (infrarroja, p.e.) más económicas y adaptadas a movilidad, que permitirán que el lápiz tenga de una vez una oportunidad de ganar popularidad. Pero no serán equipos básicos, comprados por decenas de millones al responder al precio de referencia de este año.

Como indican en el post de extremetech

Again, these are $200 Windows PCs, but in a tablet form factor. IT admins are cooing with delight at the thought: Desktops, laptops, netbooks, and thin clients could all be done away with and replaced with a tablet — a tablet, that because it’s still inherently Windows, fits perfectly into the Server/Exchange stack. If you have a Windows-based media center at home, you can replace it with this tablet. If you’re looking for a cheap first computer for Little Timmy, look no further than a $200 Windows tablet. Schools, instead of maintaining a computer lab and equipping your kids with iPads, think what it would be like if every kid simply had their own $200 Windows tablet that could be whipped out when needed.

El precio mágico. Yo apuesto por 250, que sigue siendo la mitad que el precio anterior del iPad. O lo que es lo mismo, por cada iPad se podrán adquirir dos wintablet, probablemente x86 y no sólo ARM. En el caso de los x86, hay que recordar la importancia de acceder a la biblioteca de drivers más grande de la actualidad, así como a la totalidad del software de escritorio que se sigue empleando en empresas. No creo que pueda sustituir 1/1 a grandes cantidades de equipos, sobre todo porque daños y substracciones harían de los wintablet equipos no tan rentables a la larga. Pero para todos los que tienen que pasarse medio día en reuniones, encuentros, entrevistas, ventas y, en general, eventos y situaciones de movilidad, el salto que va a ofrecer el wintablet de 250 (200?) euros va a ser muy importante.

Y hay que insistir: el iPad está diseñado para el usuario final, mucho antes para la familia que para la empresa. Los tablet Android son mucho menos claros de definir, pero la apuesta por la corporación sigue sin ser clara. Por más que, de momento, Metro salga con vocación antes de consumo que de producción, los x86 van a tener a la corporación como cliente preferente, de cara a poder integrar los tablets en las inmensas cuadras de PC disponibles de forma completa, con su exchange y su biblioteca de software autorizada.

Y en los países en desarrollo pueden acabar jugando un papel aún más importante que en los mercados maduros y desarrollados. Por más que siga en suave ascenso las ventas de tablets para empresas y particulares, en el resto del mundo un tablet puede ofrecer una serie de ventajas importantes de cara a la inclusión digital: tamaño, consumo, precio y la posibilidad de añadirle teclado y ratón. No digo que pueda sustituir al laptop convencional en todos los casos, pero sí que va a ser una opción atractiva, sobre todo si no se ofrecen al inicio laptop ARM con las mismas tripas que los WOA