Leemos en TheVerge un interesante artículo sobre Windows RT vs. Clover Trail: Intel Vs. Microsoft, how atom processors could kill Windows RT. Vaya por delante que creo que Windows RT tiene sentido y futuro, tanto por cuestiones de seguridad como, sobre todo, si se amplía a otros formatos (como pudimos ver en Limones y TV sticks hace unas semanas). Aún así, el artículo tiene su enjundia…Parte de una base que hay que reconocer que es cierta:

1. El naming de Windows RT no ha sido óptimo. Para el consumidor medio, que no está al cabo de los detalles de las tecnología que usa, ARM no significa nada. y RT tampoco le dice nada, al menos de momento. Lo que va a tender a ver es «un tablet con windows 8»
2. El escritorio heredado no operativo aumenta la confusión. Ojo, para nosotros es genial, comparado con las alternativas Android o iOS: se accede al sistema de archivos desde el primer momento. Pero si no se sabe lo que significa RT o ARM, se espera que se pueda instalar lo que uno quiera.

Yo diría que estamos en un período de transición. Dentro de un año, los sucesores del Cortex A15 en 64 bit serán lo suficientemente burripotentes como para poder propulsar una máquina virtual sin despeinarse, si la memoria acompaña. Entonces se acabarán los problemas: las aplicaciones heredadas (para mí, imprescindibles y muy queridas) se emulan y listos. Apple ya pasó por eso cuando tuvo la transición de OS 9 a OS X. Seguro que Microsoft lo puede hacer mejor, para empezar porque sus tecnologías de virtualización son lo que son.

Pero este mismo período de transición provoca problemas a Windows RT. A cambio del despertar instantáneo, de recibir notificaciones en suspensión, de una seguridad mucho mayor contra virus y de un consumo eficaz de las baterías, se renuncia a Win32 y a instalar lo que quieras por tus medios. Las ventajas son interesantes, pero los trade-off también.

Y claro, Intel no se va a quedar quieto. Su ventaja es que la evolución de los procesadores y sus capacidades se conoce al menos con 18 meses de margen; además, viven la amenaza del tsunami tableto: ni los ultrabook han servido para repuntar las ventas de PC. Eso no es culpa tanto de los tablet como de que los PC han culminado su curva de adopción y muchísimos usuarios ya sólo reponen PC… tras 5, 6, 7 años de uso, porque los PC de 2006 son perfectamente válidos hoy en día si siguen funcionando.

Así las cosas, Atom es una baza mucho más importante de lo que parece para Intel. Ya no es el procesador barato que se metía en netbooks capados de memoria para abordar el segmento más basico de los portátiles. Es una puerta privilegiada a la continuidad de las ventas, si no al aumento de las mismas. Y para eso hace falta que la experiencia sea inmaculada.

Cuando oímos la palabra «atom» pensamos en netbook con 1Gb de memoria corriendo windows XP. Pero de eso hace 5 años, y con el lobo a las puertas Intel no se puede permitir ese lujo. De momento siguen teniendo la limitación de 2Gb por ser de 32 bits (no podrían con 4Gb, y 3Gb suponen un sobrecoste no despreciable por la configuración necesaria para la placa). Más allá del límite de memoria (que WIndows 8 mejora debido a que consume menos memoria que 7), tenemos un procesador que permite configuraciones sin ventilador y que para un form-factor tablet de 10″ asegura una autonomía de al menos 8 horas, con frecuencia más. Y si se trata de un modelo híbrido, con dock de teclado que incorpora batería adicional, saltamos a unas maravillosas 12 ó 14 horas.

Clover Trail mueve Windows 8 con soltura, y si eres cuidadoso con las aplicaciones que mantienes abiertas a la vez, la memoria no tiene por qué ser un problema. Por supuesto, puedes instalar la aplicación Win32 que quieras, aunque si es exigente de GPU o de CPU probablemente un clover trail se quede corto. Pero he visto demos de edición con PowerDirector y parecía suelto.

Una cosa que no entiendo es por qué no hay equipos de Windows RT con un lápiz activo. Creo que a estas alturas el lápiz, sin ser un elemento mayoritario, está demostrando ser atractivo para bastantes usuarios como podemos ver con equipos como el galaxy note 2. Si se quiere lápiz y autonomía, la única respuesta posible hoy es un Clover Trail.

Si a todo esto le sumamos un precio en torno a los 550-650 euros, diría que en Intel pueden estar tranquilos. Es más que posible que los sustitutos naturales de los netbooks sean los híbridos o las tabletas con Clover Trail, porque el usuario en muchos casos va a seguir demandando sus aplicaciones preferidas.

Windows RT no está muerto, ni mucho menos. Pero necesita llegar con más claridad al usuario final. O puestos, cuanto menos necesita Outlook completo para entrar con buen pie en las empresas. Y acabo como empecé: si se aprovechara Windows RT en TV sticks o equivalentes, máquinas ARM de muy bajo consumo, sin monitor y extremadamente baratas, sería revolucionario para montar nuevas oficinas o reponer máquinas en oficinas existentes.