Esta va a ser una serie de entradas comentando sobre el estado actual de Microsoft y mis vaticinios para el 2020. De antemano os comento que van a ser muy polémicas y que existe la posibilidad de que me despellejéis, pero qué queréis que os diga, es como lo siento.
Hoy vamos a hablar del desarrollo de las aplicaciones Modern UI, o Metro.
Os cuento en esta entrada el resumen y mis conclusiones sobre el tema. Ya sé que no es una semana, pero es que he tenido bastante de algunas cosas. El resumen, IMHO, es que todavía le falta un poco (o un mucho). Seguid leyendo.
A vuestro reportero más dicharachero de Barrio WinTablet le ha pasado eso, y tras agitar el teléfono y enviar un comentario, le han respondido con la solución…
La semana pasada por fin me llegó el Dock que regalaban al comprar el teléfono, pero gracias a esta cabecita mía, hasta hoy no me he acordado de coger un cable HDMI de la oficina.
Algo que predije hace tiempo, todavía siendo MVP, y que ahora se confirma. Microsoft, tras un error estratégico garrafal, debía hacer esta compra si no quería morir en el ámbito del desarrollo. Os cuento más cosas de este jaez después del corte.
Resulta que el otro día el que viste y calza se cansó de que el depurador de Visual Studio 2015 no funcionara bien, que tuviera que adivinar el contenido de cualquier tipo compuesto, por lo que se pasó a la versión 2013 después de enviar un informe de error a Microsoft.
Pues resulta que no, que Visual Studio 2015 funciona bien. Más o menos.
Tanto Mahjong como Quique me hicieron unos comentarios a la anterior entrada que voy a intentar responder en esta segunda parte del artículo. Aún estoy realizando algunas pruebas más para intentar exprimir el espacio disponible que, si salen bien, comentaré en una tercera entrada.
Pero bueno, voy con la segunda, que más que entrada será entradilla….
Ya sabéis que los editores de Wintablet andamos bastante descontentos con Windows 10 y así lo estamos haciendo saber. Ya conocemos la fina ironía de Mahjong, la crítica encubierta con alabanza de Ctitanic, y mis propias quejas en modo séptimo enanito, aquél que siempre gruñía tuviera o no razón.
Durante el pasado fin de semana recomendé a uno de mis mejores amigos que siempre contase hacia atrás desde 10 antes de ponerse a escribir enfadado. Yo no puedo saltarme mis propias prescripciones así que…
Síguenos